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    • 1 nov 2023
    • 12 Min. de lectura

Pertinencia de un Consejo Consultivo en periodos de crisis.

POR Mtra. Mónica Janette Damián Ramírez,

Gerente Nacional Exp. Consejeros y Mentores de enlace+ (Programa de Institucionalización de Empresas del Tec de Monterrey



Se sabe que a nivel mundial, particularmente en países emergentes como México, las Pequeñas y Medianas Empresas (PyMEs) son las principales generadoras de empleo e importantes contribuyentes al Producto Interno Bruto (PIB). Bajo esta premisa, las políticas públicas en estos países deberían estar enfocadas en fortalecerlas a través de acceso a financiamientos, apoyos fiscales, o programas que les brinden solidez estructural para crecer de una manera ordenada y consistente.



En México, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, INEGI, se estima que hay 4.9 millones de PyMEs, de esa cantidad, 1.2 millones de PyMEs nacieron en el 2021 (segundo año de la pandemia del COVID-19), pero en ese mismo año murieron 1.6 millones, que se traduce en un 12% de empresas que cerraron ese año (INEGI, 2021). Los años 2020, 2021 y 2022 fueron difíciles para las PyMEs debido a las restricciones y efectos derivados de la pandemia.


El presente texto busca destacar los beneficios que puede obtener una PyME al recibir orientación, acompañamiento, consejos y recomendaciones de expertos que han superado con éxito los desafíos que enfrentan este tipo de negocios.


Se ha tomado como base el período 2020 y 2021 para seleccionar una muestra de 20 empresas egresadas del programa «enlace+» del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, que ofrece la oportunidad a PyMEs de que puedan vivir la práctica de la rendición y establecimiento de un rumbo estratégico a través de un Consejo Consultivo. Este programa tiene por objetivo principal establecer las bases para la institucionalización de empresas, que se logra asignando un Consejo Consultivo a aquellas que, debido a su número de empleados, nivel de facturación y otras características se consideran PyMEs.


El Gobierno Corporativo y Consejos Consultivos en las PyMEs de México.


Para comenzar, es importante brindar una visión general de lo que implica la institucionalización, el Gobierno Corporativo (GC) y la función de un Consejo Consultivo, y cómo estos aspectos pueden beneficiar a las PyMEs como punto de partida.


Resumiendo el proceso de institucionalización, se refiere a:

La implementación de estructuras y mecanismos ligados a la actuación y comunicación de los órganos de gobierno y administración, documentando estrategias, objetivos, responsabilidades, facultades, procesos, controles, riesgos, y sistemas de gestión, entre otros factores que en conjunto enfoquen y alineen la empresa hacia una misma dirección (Deloitte, 2013).


Según Manuel Garzón (2021) «no existe una definición distintiva que describa específicamente el significado de Gobierno Corporativo al tomar en consideración las características integrales del sistema GC», pero apegándonos a la definición de la Consultora Deloitte “Gobierno Corporativo es el conjunto de normas, principios y procedimientos que regulan la estructura y funcionamiento de los órganos de gobierno de una empresa”, es todo aquello que ayuda a establecer relaciones entre juntas directivas, consejo de administración y socios accionistas.


En el contexto de las PyMEs en México, parece que la fórmula funciona de manera inversa, ya que es el Gobierno Corporativo -mediante figuras que han adquirido una importancia significativa, como los Consejos Consultivos- el que establece las bases para aquellas empresas pequeñas y medianas que buscan iniciar su proceso de institucionalización.


Estos Consejos Consultivos suelen denominarse como «alternativos», «informales» o «de carácter no legal», e incluso existen críticas sobre su relevancia y existencia debido a la falta de un mandato legal y normativo que obligue a cumplir las recomendaciones de sus participantes.


Desde la perspectiva de este documento, estamos convencidos de que los Consejos Consultivos pueden aportar numerosos beneficios a pequeñas y medianas empresas, incluso cuando no exista una obligación legal o jurídica para quienes participan en ellos, como es el caso de los consejos consultivos que brinda el programa enlace+.


Pero, volviendo al aspecto conceptual, la distinción principal entre un Consejo Consultivo y un Consejo de Administración radica, como ya hemos mencionado, en que los consejeros no tienen responsabilidades legales, y sus contribuciones se basan en recomendaciones y consultas, como lo sugiere su nombre.


Sin embargo, el crecimiento de las PyMEs está directamente relacionado con decisiones influenciadas por el gobierno corporativo (GC) en cualquiera de sus modalidades.


Algunos otros estudios han abordado la forma en que las PyMEs acceden a servicios, recursos y habilidades que una estructura de Gobierno Corporativo brinda (Handley y Molloy, 2021); pero dada su naturaleza el acceso a estos beneficios puede ser “más diverso que en sus contrapartes más grandes”. Algunos de estos mecanismos, como señalan Handley y Molloy, (2021) son los inversionistas de riesgo, los empleados y el ecosistema empresarial, pero sin duda también los Consejos Consultivos figuran en el acceso que las PyMEs buscan para la obtención de los recursos que un Gobierno Corporativo podría brindarles.


Para las PyMEs, el acceso a recursos como redes de contacto, conocimientos y capacidad estratégica para dirigir el rumbo de la empresa puede ser de mayor relevancia e interés que la agency and monitoring, que normalmente es vital en el Gobierno Corporativo de las grandes empresas (Bennedsen, Kongsted y Nielsen, 2008).


La adaptación de las prácticas de Gobierno Corporativo hacia enfoques más flexibles y menos rigurosos, como los Consejos Consultivos, ha ganado significativa relevancia en el contexto empresarial de las PyMEs mexicanas en los últimos años. Es importante destacar que, a diferencia de los Consejos de Administración, que están regulados por la Ley del Mercado de Valores y son obligatorios para las Sociedades Bursátiles, no existe aún una regulación específica para los Consejos Consultivos en el país.


Algunos expertos en la materia, como la firma KPMG sugiere para el caso de las micro, pequeñas y medianas empresas que:


“El Gobierno Corporativo, sea flexible y no burocrático, logrando un nivel de profesionalización que vaya en línea con la complejidad y necesidades de la familia y el negocio. A mayor complejidad empresarial/familiar, más robusto y formal tendrá que ser su marco de Gobierno”. (KPMG, 2013, p.23.).


En esta dirección de fortalecer, profesionalizar y sentar las bases de la institucionalización a través de un Consejo Consultivo, que para este caso denominaremos de “buena voluntad”3. El programa enlace+ brinda la oportunidad a PyMEs para que puedan vivir la práctica de la rendición y el establecimiento de un rumbo estratégico a través de un Consejo Consultivo:


“El Consejo Consultivo puede ser considerado como un mecanismo de transición hacia la implementación de prácticas de Gobierno Corporativo en las empresas. Su participación puede poner a prueba la estructura de la empresa y su capacidad para rendir cuentas” (Ramiro Ochoa, 2022)


Los Consejos Consultivos en el caso de enlace+ operan principalmente bajo una filosofía de gobernanza basada en la «buena voluntad». Similar a un Consejo de Administración en el Gobierno Corporativo, estos consejos realizan evaluaciones de desempeño, promueven la transparencia y rinden cuentas, mecanismos fundamentales para que la empresa alcance sus objetivos estratégicos, fortalecer su estructura y aumentar su valor en el mercado. Como destaca Karla Bayle (2022) «es importante establecer metas financieras claras y realizar seguimiento constante para evaluar el progreso. La planeación financiera para una PyMe es fundamental y va más allá de la contabilidad fiscal y es fundamental para el negocio».


Para una PyME es de suma importancia el contexto que la permea, como el país al que pertenece, su sector, su sistema de propiedad, la distribución de acciones de los socios, familia y su ciclo de vida; por lo que algunos autores afirman que al inicio esa PyME estará poco interesada en el monitoreo y reporteo financiero. Sin embargo, esto puede tornarse diferente cuando la empresa decide emitir deuda a mediano plazo, entonces “transparentar” la información será un tema crucial para los inversionistas.


Hay autores que afirman que la participación de Consejeros Externos tiene un efecto positivo en el cambio estratégico para las PyMEs, ya que ven las tareas de la junta diferentes y complementarias de la gestión además que pueden aportar una “diversidad cognitiva” que se refiere a la existencia de múltiple información, análisis y estilos de interpretación dentro de los miembros de un grupo (Tovar, 2011). Además, aporta de manera sustancial, como bien menciona Alberto Sancho (2022), a la profesionalización de la empresa, mejora de la escalabilidad, y atención de las necesidades diarias del emprendedor.


En el caso de enlace+, estos consejos están compuestos por personas empresarias, directivas, fundadoras e inversionistas con amplia trayectoria y experiencia en sus respectivos campos, al igual que los consejeros independientes que participan en los Consejos de Administración. Es importante destacar que la participación en este programa es completamente voluntaria y sin compensación económica; estos expertos ofrecen su apoyo a las empresas durante un período de 18 meses desempeñando roles específicos, ya sea como consejeros líderes o consejeros expertos.


El Consejo Consultivo en tiempos de crisis


La importancia de contar con un Consejo Consultivo en momentos de crisis puede ser sumamente relevante. Por esta razón, se optó por analizar el impacto que la implementación de este tipo de iniciativas de Gobierno Corporativo está teniendo en algunas PyMEs, incluso en aquellas que no habrían considerado la posibilidad de acceder a ellas.


Como ejemplo de la relevancia que un Consejo Consultivo puede tener en las PyMEs que forman parte de enlace+, se tomó en consideración el periodo de la llegada del COVID-19 a México, evento destacado como uno de los más singulares experimentados por la humanidad en el siglo XXI, con un impacto significativo en las PyMEs.


Fue sobre todo en las empresas más pequeñas, las informales y las que tenían acceso limitado al crédito formal las que se vieron más afectadas por las pérdidas de ingresos que generó la pandemia (Banco Mundial 2022, Informe sobre el Desarrollo Mundial).


Según Hugo Kantis y Pablo Angelelli (2020), una encuesta realizada en más de 2 mil empresas de América Latina y el Caribe, el impacto negativo de la crisis, sobre el flujo de fondos de las empresas fue de un 66% en las que tienen hasta un año de vida; un 61% en aquellas con una antigüedad de entre uno y 10 años, y un 45% en las firmas de más de 10 años.


Para este artículo, se han recopilado datos e información obtenidos a partir de una encuesta realizada a 20 directoras y Directores de PyMEs. Estas empresas formaban parte del programa enlace+ desde 2019 y, durante el primer y segundo año de la pandemia (2020 y 2021) contaron con el acompañamiento de un Consejo Consultivo compuesto por tres personas consejeras: un líder y dos expertos.


El propósito de este estudio es entender cómo se percibe la influencia en las empresas que tuvieron el apoyo de un Consejo Consultivo durante la pandemia en el programa enlace+ que para este documento se tomó como referencia.


A continuación, presentaremos algunos datos relevantes obtenidos de la encuesta. Empezaremos con dos preguntas que brindaron información sobre el impacto económico de la pandemia durante el 2019 y 2020. Las dos últimas que se consideraron para este documento están más enfocadas en la percepción sobre el acompañamiento de un Consejo Consultivo durante ese periodo.


I. Con respecto al impacto de los ingresos de la empresa les preguntamos:

¿Qué repercusiones tuvo en los ingresos de su empresa en 2019-2020 comparados con el año anterior a la pandemia (2019)? estos fueron los resultados:




II. Sobre el tipo de afectación que consideran tuvo su empresa durante los años 2019 y 2020 de la pandemia; la respuesta más seleccionada fue la afectación en la disminución de sus ingresos.


III. En otra de las preguntas al plantearles sobre si fue beneficioso o no el acompañamiento de un Consejo Consultivo, de la muestra de los 20 encuestados, 95% de los socios y directivos enlace+ manifestaron que el acompañamiento de un Consejo Consultivo durante el primer y segundo año de la pandemia fue beneficioso para su empresa.



Entre las razones del Por qué lo consideraban de esa manera compartieron los siguientes comentarios:


➢ «Había mucha incertidumbre, sirvió poder tener consejos diversos y el apoyo de expertos»

➢ «Por el acompañamiento y la experiencia que brindaron mi consejo consultivo»

➢ «La gran experiencia del consejo, nos ayudó bastante a tomar las mejores decisiones para afrontar la crisis de la mejor manera»

➢ «Me permitió sentirme más seguro de las acciones a realizar para salir a flote como empresa ya que de lo contrario tomar decisiones sería más complicado».


IV. Por último y no menos importante, se planteó en una escala de 1 a 5, sí consideraban que el Consejo Consultivo de enlace+ les ayudó en los siguientes aspectos durante el periodo de la pandemia:

a) Toma de decisiones adecuada para el momento

b) Contactos de valor (Proveedores, clientes, mentores, consultores, agentes del ecosistema de emprendimiento)

c) Recomendaciones estratégicas sobre el futuro de la empresa

d) Acceso a financiamiento mediante capital privado o público

e) Otro ¿Cuál? Y las respuestas fueron las siguientes:


De las puntuaciones de 1 a 5 destaca el apoyo del Consejo Consultivo en la «Toma de decisiones» y las «Recomendaciones estratégicas sobre el futuro de la empresa» como las más importantes.


Quienes contestaron «otro» comentaron entre sus respuestas:


● «Guía sobre cómo ejercer la dirección general de un nuevo director que tuvo que entrar de emergencia en la pandemia por cuestiones de salud del antiguo director general».

● «Salir adelante en la pandemia y estructurar una ronda de inversión».

● «Vinculación con proyectos enfocados a impacto social y ambiental».

● «Desarrollo de Planeación Estratégica». (2)

● «Acompañamiento psicológico como emprendedor».

● «Estrategia y capacitación al equipo».


En un Gobierno Corporativo común y corriente con un Consejo de Administración, el último propósito del buen gobierno es agregar valor, y velar porque quienes contribuyen directa o indirectamente en su generación puedan participar del aumento de este (Garzon, 2021). Es decir, hay una responsabilidad legal pero también existe una remuneración derivada de esa aportación de valor traducida sencillamente en «Consejos».


En un Consejo Consultivo, como el caso que examinamos de enlace+, el valor que se genera a quienes contribuyen al ordenamiento, estructura y crecimiento estratégico de la empresa, llámese los consejeros que participan de manera pro bono; es un valor más intrínseco vinculado al networking, conocimiento adquirido, experiencia ganada y el deseo de apoyar a empresarios en etapas más tempranas para con ello cerrar el círculo virtuoso del impulso al desarrollo económico del país.


Desde el punto de vista aquí abordado, sería ideal para una empresa PyME tener un equipo de personas expertas que haga las funciones de Consejo, enfocado en la empresa, pero también en el empresario/emprendedor, fundador o director (para este tamaño de empresa, es la misma persona en muchas de las ocasiones) con el enfoque de mentorship sobre todo para la toma de decisiones que en muchas ocasiones se hace desde la soledad. Es decir, que tenga “al menos” un órgano de expertos haciendo la función de un Gobierno Corporativo no coercitivo orientando estratégicamente en la toma de decisiones.


Las 20 empresas enlace+ que se tomaron en consideración, sólo son una muestra del reconocimiento que hay por parte de los dueños y directivos de estas empresas de la pertinencia de un Consejo Consultivo que los guíen de manera estratégica en la toma de decisiones en cualquiera de las áreas de la empresa que esto implique. Llama la atención que el 98% de estos encuestados dijo «Sí» al beneficio de tener un Consejo Consultivo en estos dos años en los que la crisis mundial derivada por la pandemia tuvo un importante impacto.


Aunque el enfoque de la empresa haya estado destinado a solventar las operaciones críticas que aumentaran el flujo y ventas; el acompañamiento de un grupo de personas consejeras fue muy importante, al menos para este grupo de empresas aquí presentado.


La ventaja de esto es, que cuando ya se inició un camino para la institucionalización a través de un Consejo Consultivo de apoyo operativo y comercial a uno más estratégico; en teoría debería ser más sencillo.


De ahí la importancia y pertinencia de seguir impulsando la buena práctica del Gobierno Corporativo en cualquiera de sus fases y características; pero siempre sentando las bases para la buena institucionalización de la empresa que por ende impulse empresas más sólidas, maduras y con estructura, pero también capaces de reinventarse en situaciones críticas.


La etiqueta de lo “informal” de los Consejos Consultivos que en efecto no se enmarcan bajo una responsabilidad legal direccionada por la Ley General de Sociedades Mercantiles y la Ley del Mercado de Valores en el caso de México; toma otra dimensión cuando se analizan casos como el de enlace+, en los que el impacto en el rumbo estratégico de la empresa es directamente proporcional al nivel de aportaciones y recomendaciones que un grupo de expertos de manera voluntaria puede llegar a hacer con el fin de contribuir en el fortalecimiento de un futuro en las empresas de un México más próspero; suena idealista, pero al menos en este caso específico es real.


Quizá una segunda edición deba de hacer un análisis más cuantitativo del impacto de un Consejo Consultivo en las PyMEs, o el impacto de programas como enlace+ en la generación de empleos, incremento en ventas, incremento en las utilidades reales de la empresa y con ello quizá pensar en replicar este modelo ya validado.


Por lo pronto, se destaca que para poder llegar a nuevas fuentes de financiamiento, el tener la capacidad de respuestas rápidas y pertinentes en el momento y la optimización en la toma de decisiones; el camino se puede acortar o “llevar más fácil”, cuando se cuenta con el respaldo de personas que quizá ya recorrieron ese camino o trayectos similares.


Referencias bibliográficas:


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