POR OLIVIA SAADI
La Norma Oficial Mexicana NOM-035-STPS-2018, mejor conocida como NOM-035, entró en función el 23 de octubre de 2019 con la finalidad de velar por el bienestar del colaborador. Aunque el desarrollo de la normatividad se dio en 2016 por parte de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), es hasta ahora que se establecen los elementos para identificar, analizar y prevenir los factores de riesgo psicosocial.
Personas exhaustas, accidentadas, o afectadas por alguna circunstancia, dentro de la jornada laboral, o aquellos que sufren de tratos denigrantes u ofensivos, y quienes ya no pueden levantarse de la cama sin razón aparente, son considerados en los Factores de Riesgo Psicosocial anclados al trabajo que debe anticiparse a través de expertos.
De acuerdo a la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la salud mental es un tema relevante en las empresas, por lo que recomienda crear políticas de prevención y acción para que sus empleados no adquieran trastornos emocionales debido al trabajo que efectúan.
La iniciativas de este organismo especializado de las Naciones Unidas contempla el estrés, trastornos de sueño, depresión, drogas y alcohol dentro de los Factores de Riesgo Psicosocial, que a largo plazo provocan pérdidas millonarias en el sector productivo de hasta 16 mil millones de pesos sin contar los padecimientos físicos que repercuten. México presenta uno de los más altos niveles de estrés laboral, con hasta 75%, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS); es además el primer lugar en jornadas laborales más largas, con un promedio de 2 mil 225 horas (92.70 días), en contraste con países desarrollados, como Alemania, que ostenta un modelo de mil 363 horas (56.79 días), según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
El objetivo principal de la NOM- 035 es bajar las enfermedades provocadas por el estrés laboral y brindar al empleado un ambiente humanizado y agradable dentro de la empresa, así como jornadas laborales de menor duración y una mejor relación de trabajo-familia y/o
escuela si así se requiere.
Para ello, las empresas establecerán un llenado de guías ceñidas al número de colaboradores (1 a 15, 16 a 50 y 50+) para identificar a aquellos en riesgo psicosocial y las medidas o prevenciones a tomar para atender sus necesidades particulares.
Cabe señalar que se debe contar con un líder y un comité de seguridad e higiene que velen por esta buena práctica. La OIT recomienda adaptar el modelo básico de una semana de trabajo de máximo 48 horas (no más de 10 horas al día). Si regularmente se necesita que el personal trabaje más, se deberán revisar los niveles generales de dotación de personal y la asignación de tareas.